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Cómo limpiar los oídos

Spanish infographic cleaning ears

Cada día, millones de estadounidenses utilizan hisopos de algodón para limpiarse los oídos. Sin embargo, los hisopos pueden empujar el cerumen más adentro del oído, causando la obstrucción de cera en el canal auditivo.

Las velas o conos en los oídos también pueden ser peligrosos. La Administración de Alimentos y Medicamentos puede causar quemaduras, perforación del tímpano y obstrucción del conducto auditivo. Es especialmente peligroso para los niños.

A continuación se indican cinco formas de limpiar correctamente el cerumen de los oídos:

No haga nada

El cerumen es una sustancia natural antibacteriana y antifúngica que mantiene sanos los conductos auditivos. En algunos casos, la cera puede acumularse y causar pérdida de audición o molestias. En esos casos, puede utilizar las técnicas que se indican a continuación, pero sólo si no se ha sometido a cirugía de oído y sabe que no tiene un agujero en el tímpano.

Agua tibia

  1. Inclina la cabeza hacia un lado para que el oído quede hacia arriba
  2. Utilice una jeringa y rocíe suavemente el agua tibia en el borde exterior del conducto auditivo externo hasta donde se encuentra la cera
  3. Inclina la cabeza hacia atrás a su posición normal y deja que el agua drene. Repita la operación si es necesario
  4. Una vez que la cera se haya eliminado por completo, seque el oído

Aceite

(Aceite de oliva, aceite de almendras, aceite para bebés o aceite mineral)

  1. Incline la cabeza hacia un lado de modo que la oreja quede hacia arriba
  2. Introduzca el aceite en el conducto auditivo
  3. Espere cinco minutos y deje que las gotas se asienten
  4. Drene el aceite

Peróxido de hidrógeno

El peróxido de hidrógeno puede colocarse en el oído por sí&²Ô²ú²õ±è;solo o utilizando una pequeña jeringuilla de bulbo (como las que se utilizan para eliminar los mocos de las fosas nasales de los bebés). Estos utensilios son de venta libre.

  1. Inclinar la cabeza hacia un lado para que la oreja quede hacia arriba
  2. Introducir un poco de agua oxigenada en el conducto auditivo (lo suficiente para cubrirlo)
  3. Espere unos minutos para que el peróxido se disuelva
  4. Dejar escurrir el peróxido de hidrógeno

Acudir a un médico

Un médico puede eliminar el cerumen con herramientas seguras. Si tiene dolor de oído, supuración o dificultad para oír, debe acudir a un médico para que le evalúe.